"El mar es una fuente inagotable de inspiración. Sus estados de ánimo y su luz cambian constantemente, y mi deseo es reflejar esa belleza cambiante a través de mi arte. Mi trabajo es una reverencia a la naturaleza, una invitación a sumergirse en el alma del mar, y al mismo tiempo, un llamado a la conciencia para proteger nuestros océanos, tan frágiles y vitales para todos."
Sobre mí
Nacido el 1 de marzo de 1968 en El Masnou, este pintor autodidacta comienza su viaje artístico en su niñez, de la mano de su padre, Manolo González, un sastre apasionado por el dibujo y la pintura, quien le transmite las primeras enseñanzas sobre las técnicas artísticas. Desde entonces, el mar y la costa de su tierra natal, la playa de Ocata, se convierten en su mayor fuente de inspiración.
Formado en diseño de moda, estilismo y patronaje, su amor por el mar se traduce en un estudio profundo de las olas, las espumas y los matices infinitos que ofrece el agua en constante cambio. A través de su mirada paciente y atenta, logra captar las luces, sombras, formas y texturas que el mar presenta a cada hora del día, en función de las estaciones y del tiempo.
Su técnica, meticulosa y detallista, basada en las veladuras y pinceladas precisas, se convierte en una herramienta perfecta para reproducir la sutileza de la naturaleza marina. Con cada trazo, invita al espectador a adentrarse en el universo del mar, evocando desde la serenidad más absoluta hasta la tensión de una tormenta en pleno apogeo.
Cada obra, especialmente las de gran formato, transportan al observador a las orillas de un mar que parece cobrar vida propia. Desde las olas rugientes hasta las tranquilas aguas que reflejan la calma de una mañana sin viento, sus pinturas capturan la esencia misma del Mediterráneo en su infinita diversidad.
"El mar es una fuente inagotable de inspiración. Sus estados de ánimo y su luz cambian constantemente, y mi deseo es reflejar esa belleza cambiante a través de mi arte. Mi trabajo es una reverencia a la naturaleza, una invitación a sumergirse en el alma del mar, y al mismo tiempo, un llamado a la conciencia para proteger nuestros océanos, tan frágiles y vitales para todos."
Así, con cada pincelada, rinde homenaje a ese vínculo profundo que tiene con el mar y la naturaleza, con la esperanza de que sus obras despierten en los demás la misma admiración, emoción y sentido de preservación.
